sábado, 14 de junio de 2014

Cuatro cartas. 1.

Mi amor.


Mi amor. Estarás aquí igual, permaneces y te quedarás porque has sido en gran parte alguien que me ha hecho crecer. Y crecer con zapatazos y tropezones es igual a crecer también. Porque lo realmente importante es el afecto y el dedicar parte de tu vida a alguien para verle reír, para acompañarle, para amarle. No es suficiente decir "gracias", pero te lo agradeceré la vida entera, así ya nunca más te vea, pues te llevo conmigo en mi andar, al levantarme cada día y mirar a mi alrededor. Y es ese tiempo magnifico, en el que estuviste, el que me ha moldeado para agradecerte hoy. Así sin vergüenzas, sin culpas y penas, sin pendejadas superficiales de que si funcionó o no. No hay negación de ti en ninguna parte, tanto así que debes imaginarte que quienes me amen amaran a la vez algo de ti, así de alimenticio ha sido, así de importante fue.