Si pudiera vivir nuevamente mi vida...
En la próxima cometería más errores.
No intentaría ser tan perfecto, me relajaría más.
Sería más tonto de lo que he sido,
de hecho tomaría muy pocas cosas con seriedad.
Sería menos higiénico.
Correría mas riesgos, haría más viajes,
contemplaría más atardeceres,
subiría más montañas, nadaría más ríos.
Iría a más lugares a donde nunca he ido,
comería más helados y menos habas,
tendría más problemas reales y menos imaginarios.
Yo fui de esas personas que vivió sensata
y prolíficamente cada minuto de su vida;
claro que tuve alegrías.
Pero si pudiera volver atrás trataría
de tener solamente buenos momentos.
Por si no lo saben, de eso esta hecha la vida,
solo de momentos;
no! no te pierdas el ahora.
Yo era uno de esos que nunca iban a ninguna parte
sin un termómetro, una bolsa de agua caliente,
un paraguas y un paracaídas.
Si pudiera volver a vivir comenzaría a andar descalzo
a principios de la primavera y
seguiría así hasta concluir el otoño.
Daría mas vueltas en calesita;
contemplaría más amaneceres
y jugaría con los niños,
si tuviera otra vida por delante...
Pero ya ven,
tengo 85 años y sé que me estoy muriendo...
Jorge L. Borges.
En la próxima cometería más errores.
No intentaría ser tan perfecto, me relajaría más.
Sería más tonto de lo que he sido,
de hecho tomaría muy pocas cosas con seriedad.
Sería menos higiénico.
Correría mas riesgos, haría más viajes,
contemplaría más atardeceres,
subiría más montañas, nadaría más ríos.
Iría a más lugares a donde nunca he ido,
comería más helados y menos habas,
tendría más problemas reales y menos imaginarios.
Yo fui de esas personas que vivió sensata
y prolíficamente cada minuto de su vida;
claro que tuve alegrías.
Pero si pudiera volver atrás trataría
de tener solamente buenos momentos.
Por si no lo saben, de eso esta hecha la vida,
solo de momentos;
no! no te pierdas el ahora.
Yo era uno de esos que nunca iban a ninguna parte
sin un termómetro, una bolsa de agua caliente,
un paraguas y un paracaídas.
Si pudiera volver a vivir comenzaría a andar descalzo
a principios de la primavera y
seguiría así hasta concluir el otoño.
Daría mas vueltas en calesita;
contemplaría más amaneceres
y jugaría con los niños,
si tuviera otra vida por delante...
Pero ya ven,
tengo 85 años y sé que me estoy muriendo...
Jorge L. Borges.