lunes, 22 de noviembre de 2010

Bebé y mamá elefante

Tan pequeñito. Acostadido duermes con unas medias que te quedan gigantes, un monito que te cuelga en el cuello, y nada puedes hacer por ello, pues eres dependiente de esta adulta que se encarga de ti.

Tan indefenso. No comerás hasta que yo te acerca el pecho, y salga algo de el. Con tus manitas no puedes aun alcanzar nada, ni siquiera sujetarlo a el.

Sencillo y sublime. Pareces un ángel con piel tersa, con olor a cielo, y mirada inocente. Mirada que me mata cuando al verla me dice "mami quiéreme" "mami te quiero"

Tus manos dicen todo. Dicen que no ha pasado nada en ti, que eres puro y bueno. Eres bueno, como miel, como un ángel otra vez.

Inocente y puro, inocente y vulnerable. Necesitas de mis manos para sujetar tu cabeza. Necesitas de mi pecho para apoyarte a el. Necesitas de mi espalda para andar. Necesitas de mis pies para levantarte. Necesitas de mis ojos, mis oidos, mi nariz...

Como quisiera disfrutarte junto a alguien. Como quisiera embelesarme y compartir que te quiero. Como quisiera darte todo lo que mereces. Si eres tan bello, tan perfecto. Eres lo mas hermoso que ahora tengo. Como quisiera compartir la alegría que tengo cuando te veo practicar una sonrisa. Como quisiera no hablarle al aire y a la nada de ti. Como quisiera que lo que siento al verte sea comprendido porque alguien mas, solo alguien mas, siente lo mismo de la misma manera que yo.

Tan pequeñito. Tan hermoso, digno de merecer todo el amor que ni yo misma puedo dar. Es mucho mas. Tan indefenso. Que cara mas linda al despertar. Que manita que me aprieta el dedo pulgar aferrándose para no caerse.

Cuánto necesitas de mi bebe. Cuánto quieres que te proteja. Cómo te sirvo completica. Eres tan bello!