sábado, 14 de diciembre de 2013

Autorretrato autoenviado

20 de septiembre de 1823 (léase bien el año y aún sucede en nosotros)

Jamás te había visto tan bella y tan encantadora a un tiempo como lo estabas ayer por la noche. Habría dado mi vida por estrecharte entre mis brazos. Dime, ¿era, pues, tu amor por mí lo que te embellecía así? ¿Era la pasión con la que ardo por ti la que te hacía tan seductora a mis ojos? Ya lo viste, no podía dejar de mirarte, de besar la cadenita de oro. Cuando saliste, hubiera querido postrarme a tus pies y adorarte como a una divinidad. ¡Ah! ¡si me amaras la mitad de lo que yo te amo! Mi pobre cabeza está perdida; repara, amándome, el mal que me has hecho. 
A las ocho te espero con el corazón palpitante.

De Chateaubriand a madame de Castelane




domingo, 8 de diciembre de 2013

Opción: suprimir

















La gente muere
La muerte está latente en las venas
La gente se muere, y hay que acostumbrarse a eso
Que la gente buena y no tan buena muere
Que los niños inocentes también mueren
Que no hay números para repartir para la muerte
La muerte llega y ya, y así se lleva a quien quiere
Y ni que pidamos a Dios
Ni a Yahvé, ni a Alá, ni a Mahoma
La muerte es parte de la vida
Ni que te quiebres el corazón alguien no morirá cuando tiene que morir
La muerte está al lado de la vida, allí esperando que le de gusto protagonizar
Allí dando pasos junto a toda la gente
La muerte, la hermana gemela de la vida
La muerte desconocida pero no menos vigente que la vida.

viernes, 6 de diciembre de 2013

Old and wise


Como si nada pasa



Viernes, 11:00 p.m., acostada viendo el techo
Nada que hacer, la puerta está cerrada y a nadie espera
Afuera se escucha una melodía navideña, algún villancico
Pero no es navidad, es abril

Hay un olor a carne guisada y ella ni siquiera siente hambre
Su vientre duele y el piso está frío
02:00 a.m., se escucha la misma melodía ahora más cercana
Pero no es navidad, es abril

Si suena la ventana como si el viento remolcara ramas
Ella se asusta y cree que algo pasa
Ya no escucha la melodía sólo escucha el crujir de la ventana
Parece que neva, pero no es navidad

Agua caliente, las luces apagadas
Alcanza el paño y se desnuda frente a su cama
Pero al pasar por la sala donde está la ventana
No mira ni se aletarga

06:00 a.m., nadie llegó, ella no durmió
Los ruidos, la música y el frío de abril la envuelve en sus sabanas
No hacen falta las luces, el sol ya se asoma por la ventana
Y si abre la puerta estará detrás de ella la vida paralizada









Dios


Es evidente que Dios me concedió un destino oscuro. Ni siquiera cruel. Simplemente oscuro. Es evidente que me concedió una tregua. Al principio, me resistí a creer que eso pudiera ser la felicidad. Me resistí con todas mis fuerzas, después me di por vencido y lo creí. Pero no era la felicidad, era sólo una tregua. Ahora estoy otra vez metido en mi destino. Y es más oscuro que antes, mucho más”.

"La Tregua " M.B.