viernes, 23 de marzo de 2012

Escribiré, escribiré, lala, lala, azz...


Ya que les gusta leerme... escribámos.

He publicado algunos videos, lo hago porque la música me inspira hasta para fregar los platos que a otro no le gusta fregar. La música y su representación visual es obra de arte para mis oídos, para mis ojos, para mis cuerdas (no se por qué el teclado me reconoció la palabra CURDA en este momento...) vocales

Mañana voy a pintarme el cabello, ya no me gusta su color. Necesito cambiar constantemente todo, incluso hasta la forma de enjabonarme.

Salvador no me deja hacer nada en casa, quiere tiempo completo atención para él. Que difícil es ser madre. Definitivamente olvídate de tu tiempo. Ya no es tuyo, es de tus hijos. A amarrarse los zapatos que lo que viene es correr.

Ayer un cantinero me dijo que me prepararía el café más rico que haya en el mundo cada día. Creo que fue un piropo, o quizá vanidad del cantinero.

Qué hacemos con las personas que se comportan de un momento a otro de manera totalmente distinta? Específicamente cuando pasan de estar sola contigo a acompañadas por más de un par de personas. Bueno, no sé si logre expresar lo que quiero.

Detesto -a pesar de que soy la menos indicada para corregir ortografía- cuando acentúan palabras para pretender que uno crea que se la saben todas, porque de paso lo hacen mal. Recomiendo que no acéntuen si no saben en qué sílaba va la mayor fuerza de una palabra.

Un carro muchas veces es la solución al metro.

Un día preguntaré a los malándros de la camioneticas cuando se monten a atracar que si aceptan Cesta Ticket.

Hoy voy a dormir junto a Salvador, lo llevaré a mi cama y me acurrucaré con él muy rico porque hace frió y necesito calor. Y los voy a dejar aquí a ustedes preguntándose qué hacen leyendo esto.

Los quiero. Aunque mal paguen...